MANIFIESTO
POR UNA CULTURA DE LA PAZ Y DE LA NO-VIOLENCIA
Respetar todas las vidas
Respetar la vida y la dignidad de cada persona, sin discriminación ni prejuicios.
Rechazar la violencia
Practicar la no-violencia activa, rechazando la violencia en todas sus formas: física, sexual, psicológica, económica y social, en particular hacia los más débiles y vulnerables, como los niños y adolescentes.
Liberar mi generosidad
Compartir mi tiempo y mis recursos materiales cultivando la generosidad a fin de terminar con la exclusión, la injusticia y la opresión política y económica.
Escuchar para comprender
Defender la libertad de expresión y la diversidad cultural privilegiando siempre la escucha y el diálogo, sin ceder al fanatismo, ni a la maledicencia y el rechazo del prójimo.
Preservar el planeta
Promover un consumo responsable y un modo de desarrollo que tenga en cuenta la importancia de todas las formas de vida y el equilibrio de todos los recursos naturales del planeta.
Reinventar la solidaridad
Contribuir al desarrollo, de mi comunidad, propiciando la plena participación de las mujeres y el respeto de los principios democráticos, con el fin de crear juntos nuevas formas de solidaridad.
0 comentarios:
Publicar un comentario